En casi todas las pymes tras estos duros años pasados se puede observar como muchas nuevas oportunidades de negocio se malogran por ir dejando de lado todo lo que sea nuevo o ampliación de negocio en detrimento del día a día por lo que ya tenemos y conocemos.

Lo siguiente que suele ocurrir por desgracia es ver que otros competidores han estado más atentos y han cogido algo que nosotros ni siquiera hemos analizado o incluso hemos obligado al proveedor a buscar otros canales que en el futuro nos van a restar ventas y nos van a cerrar las puertas cuando sin embargo lo tuvimos muy fácil.
Esto no solo afecta a nuestro negocio desde el punto de vista financiero sino también al clima interno, al estado de ánimo y hace menos estimulante el trabajo al permitir que todos se acomoden sin tener que incorporar nuevos conocimientos y nuevos retos. Parte del equipo puede pensar y con razón que falta más orientación al futuro por parte de la Dirección de la empresa al ver que nada cambia pero el mercado sí.
Por no hablar de la imagen ante nuestros clientes que no ven evolución en nuestro negocio si siempre trabajamos lo mismo y sobre todo si trabajamos lo mismo que todos los demás actores del mercado, así soy uno más del montón, no hay diferenciación.
No podemos ir como zombis por el mercado trabajando más de lo mismo, eso no es lo que esperan los clientes de nosotros, quieren dinamismo, quieren más y quieren novedades y aquí el que no se moja y va a lo cómodo pierde el tren y nunca lo alcanzará.
Si por desidia o por falta de valor permitimos que se nos pare la creatividad y la innovación en nuestra empresa, el billete para el desastre ya lo hemos sacado.
No se trata de pensar que un nuevo producto dentro de una gama que ya trabajo es innovación, esto es un grave error, la auténtica innovación es romper los moldes ya existentes y hacer nuevas cosas que aumenten el nivel de servicio a nuestros clientes.
Muchas gente no sabe interpretar las señales que nos va enviando el mercado, no sabe ver las tendencias y por eso se quedan obsoletos, no exploran lo que realmente valora ahora el cliente y siguen creyendo ilusamente que todo sigue igual.
Si quieres saber lo que hay delante pregunta a los que vuelven pero ten en cuenta que ya será tarde para tu negocio.
Para jugar hoy día un papel relevante en el mercado se necesita el talento diferencial que es aquel capaz de ver las oportunidades e ir a por ellas antes que nuestros competidores.
Ser diferente es costoso pero te puede brindar una segunda oportunidad pero no serlo es apuntarse a una muerte trágica e inevitable.
Muchos responsables de empresas sobre todo si llevan mucho tiempo en ellas entraron en un momento muy diferente, con objetivos diferentes y lo han podido hacer bastante bien pero ahora son incapaces de visualizar como ampliar su mercado y por esa razón ya no generan valor y sobran por muy duro que sea reconocerlo. Ya no viven la empresa sino que vegetan en ellas sin ilusión, sin pasión alguna y van pasando las jornadas y los días con lo mismo de siempre, sin pensar en las consecuencias de no crear nuevas relaciones, nuevos negocios, nuevos cambios de rumbo.
Si no somos capaces de renovar nuestro modelo de negocio no valemos para dirigir la empresa o un área importante de la misma ya que si tenemos alguna responsabilidad es para crear valor al cliente y cada vez se crea valor de diferentes formas ya que no es algo estático sino dinámico y cambiante.
Se comenta mucho últimamente que antes los fines de semana interrumpían ventas y el lunes las podíamos recuperar total o parcialmente pero ahora ya no es así ya que si no estás cuando el cliente quiere se busca otros canales, otras formas de comprar y esas ventas que antes no se hacían y ahora sí las perdemos para siempre.
Me despido como siempre deseando mucha suerte porque la van a necesitar para aquellos que por comodidad o falta de visión se niegan a renovar, ampliar o hacer cosas nuevas en sus negocios y deseando mucho éxito a los que sí apuestan por no cerrarse a nada nuevo con unas frases para su reflexión:

-No se equivoca el hombre que prueba distintos caminos sino aquel que por temor a equivocarse no camina.
-Sabes que estás en el camino correcto cuando pierdes el interés en mirar atrás.
-Si encuentras un camino demasiado fácil, ten cuidado, quizás no te conduzca a ninguna parte.
-El secreto de permanecer siempre vigente es comenzar a cada momento.

José Carrasco
FERSAY GROUP
www.josecarrascolopez.com